Hacia una revisión de las relaciones entre políticos y periodistas

Resumo

Apesar de que la información política, como ha ocurrido con otros focos de interés informativo, haya sufrido sustanciales variaciones en los últimos años; siempre, en última instancia, políticos y periodistas se ven obligados a entenderse. En la medida en que comparten un mismo escenario, se han visto abocados a no poder vivir los unos sin los otros. Por una parte, los políticos saben que su notoriedad está condenada a pasar por el filtro de la mediocracia, y para ello no dudan en ampararse en lo servicios de una nueva estirpe de profesionales, los denominados jefes de prensa, cuya función última es hacer de intermediarios entre el político o la organización y los medios de comunicación. Por otro lado, los periodistas establecen extrañas complicidades con los políticos y contraen algunos vicios que deforman los productos informativos. Resulta evidente que las actuales relaciones entre profesionales de la información y la clase dirigente exigen una revisión. El actual modelo chirría y requiere ajustes que siempre irán en beneficio de los receptores últimos de la información: los ciudadanos.